Aunque el frío queme... y se calle el viento

¡Feliz Año Nuevo! Con poesía, con coraje, con música... Gracias por seguir este blog.

No te rindas. Escucha el poema de Mario Benedetti aquí.

Mil versos

Mil versos no es mucho. Mil versos escasos bastan para convertir a este medio fraile, como decía Teresa de Ávila, bajito y de mirada ardiente, en uno de los poetas más celebrados de la literatura castellana.

Mil versos. Versos que arden, que hay que sujetar con brío a las cadenas métricas porque cantan al amor ―gran tema de los poetas― pero no cualquier amor, sino aquel amor de los amores que salta las fronteras del entendimiento y del lenguaje, toda ciencia trascendiendo...

Mil versos bastan. Mil versos que han calado en nuestras letras, muchos de ellos inspirados en las viejas cadencias semíticas de la Biblia, muchos de ellos inspiradores de tantos poetas hasta el día de hoy.

Mil versos. Pocos pero densos. Destilados como gotas de licor fortísimo y sabroso. Sí, sabroso como esa pasión que llena el corazón y rebosa en los labios y en la pluma. Me impresiona saber que los más encendidos versos fueron escritos en prisión. Traicionado, abandonado, relegado en una celda húmeda donde los días parecían largas noches, Juan de la Cruz nunca perdió la libertad. Porque el arte, si es auténtico, pide muy pocas cosas, pero indispensables. Y una de ellas es ser libre.

14 de diciembre. En este día recuerdo a Juan de la Cruz, pequeño fraile que amó la hermosura del mundo, pero al que se le hacía pequeña la vida para contener un amor tan grande. Lo recuerdo y recito despacio…

Oh llama de amor viva,
que tiernamente hieres
de mi alma el más profundo centro.
Pues ya no eres esquiva,
¡acaba ya si quieres!,
rompe la tela de este dulce encuentro.
Oh cauterio suave,
oh regalada llaga,
oh mano blanda, oh toque delicado,
que a vida eterna sabe
y toda deuda paga.
Matando, muerte en vida la has trocado.
Oh lámparas de fuego,
en cuyos resplandores
las profundas cavernas del sentido,
que estaba oscuro y ciego,
con extraños primores
calor y luz dan junto a su querido.
Cuán manso y amoroso
recuerdas en mi seno,
donde secretamente solo moras.
Y en tu aspirar sabroso,
de bien y gloria lleno,
¡cuán delicadamente me enamoras!

Enlace a las poesías de san Juan de la Cruz.

Página de San Juan de la Cruz en Cervantes Virtual.

Kedadas en Barcelona

Hace ya... ¡más de cinco años! que un grupo de compañeros de foros literarios nos decidimos a "kedar". A vernos cara a cara, a oírnos la voz, a compartir más que letras y palabras, ¡presencia viva! y conocernos. Así empezó todo, primero en Badalona y luego en Barcelona ciudad. Desde entonces se han sucedido muchos encuentros en los que todos hemos podido intercambiar inquietudes, alegrías, proyectos y un puñado de relatos. Hemos crecido, ¡y seguimos!

Os invito a visitar nuestro recién estrenado blog de las kedadas.